Hay a nuestro alrededor tanta gente estupenda y capaz de hacer tantas cosas que muchas veces nos vemos como personas limitadas, mezquinas, grises. Llegamos incluso a sentir desprecio de nosotros mismos y añoramos ser alguien maravilloso. Luego nos damos cuenta de que nosotros somos como somos, y que dándonos un poco de cariño somos mucho más felices.
2 comentarios:
Por desgracia aprender esa lección cuesta...
Y llega ese instante maravilloso en el que alguien te quita la venda, te regala unas líneas llenas de sabiduría que te hacen ser consciente de donde está el fallo...
Elisa.
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