Muchas veces la buscamos y no la encontramos.
Falta nuestra musa. Trabajamos en un escrito y nos viene una melodía estupenda. Intentamos pintar un boceto fantástico y nos llega una locuacidad estupenda. Lo mejor: cuando venga nuestra musa que nos coja trabajando.
6 comentarios:
Es la eterna cuestión, las musas vienen porque estamos o vamos por que ellas están?.
Sirve solo creo el 10% de inspiración y el 90% de transpiración...trabajar:-)
Un saludo
"las musas ya no reciben
están ocupadas en afilarse las uñas"
Daniel Rabanaque
Estás en lo cierto, Hera. El trabajo es la base de la inspiración. Bienvenida a este blog. Saludos
Trabajad malditos, trabajad, que yo la musa estoy ocupada...;)
impresionante ese 200...
Jajaja ¡qué buenos son los Reyes, José Antonio...!
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