Hubo un tiempo no muy lejano en el que los sueños eran algo melancólicamente alejado del deseo y furiosamente cercano al sentimiento. La mirada dejaba un hueco al asombro y el ambiente gélido de un momento exprimía la imaginación que calentaba el estallido de unas risas.
3 comentarios:
GUÁCALA!
El sentimiento todavía persigue al sueño...o quizás se siente en sus huellas que ha seguido buscandolo?
Si, si, si. Puedo escuchar las risas :-)
Salu2 Córneos
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