
En esta vida el término amistad lo tenemos sobredimensionado. Pensamos que los amigos realmente están dispuestos a estar a por tí por encima de cualquier circunstancia. Quizá ponen en la balanza lo que les hemos dado nosotros a ellos y no les compensa salir a nuestro encuentro. Unos acuden agradecidos por algo que tal vez para nosotros no tuvo ninguna importancia. Otros se sienten despechados por nuestra ausencia en un momento que no tuvimos presente. Unos llaman con la mirada y otros dirigen la vista hacia otra parte. Querer y no querer encontrarse.